Luego de que les prendieran fuego su local mayorista y perdieran casi todo después de sufrir un robo, se las arreglaron y continúan trabajando. Un ejemplo de cultura de trabajo.
Durante el fin de semana largo de los carnavales, la gente del mayorista Ali-An, el cual se ubica a pocos metros del cruce de Korn, habían recibido la noticia en la madrugada de que su local había sido robado y además lo habían prendido fuego.
Ante una situación durísima para sus propietarios, el caso no tardó en viralizarse por las redes, dejando ver una vez más como la delincuencia golpea en Korn. Tan solo les robaron algunas mochilas y elementos de electrónica, fue más el daño que generaron con el fuego que con lo sustraído del local que se encuentra sobre la Av. Pte. Perón.
Tan solo unas horas después, los responsables del comercio y sus empleados se arremangaron y fueron a limpiar y a rescatar la mercadería que las llamas no alcanzaron a dañar, al otro día se pasaron al local de al lado para seguir trabajando.
Alicia Rodríguez, una de las dueñas del comercio, explicó a Noticias que “acá nadie baja los brazos, somos gente de trabajo”, dijo a este medio. Inclusive mucha gente se solidarizó con esta familia por la situación vivida, “les agradecemos a todos los que nos mandaron mensajes y se ofrecieron a ayudarnos. Pero nadie del municipio ni siquiera se acercó a preguntarnos si estábamos bien. No pido que nos den cosas, hablo del lado humano”, detalló Alicia, que además había comentado que las pérdidas ascendían al millón de pesos.
Ante un duro golpe la gente demuestra que hay dos opciones, o quedarse en la depresión, o salir para adelante. Ellos eligieron la número dos, porque demostraron que más allá de las dificultades son gente de trabajo, que no se van a rendir y que quieren seguir.
Aún no pierden la esperanza de que los responsables del robo e incendio sean atrapados, pero eso ya está en manos de la justicia. Mientras tanto, la gente del mayorista le pone el pecho a la situación.
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