Un breve análisis del comicio del pasado domingo
Las elecciones del pasado domingo dejaron bastante para analizar en San Vicente. Nicolás Mantegazza será el siguiente intendente por los próximos 4 años, pero desde Juntos por el Cambio quedaron varios elementos para tener en cuenta.
El microclima político que se vive en el distrito es muy particular, en el 2015 se vivió algo muy destacado, porque la gente depositó la confianza en Gómez, un vecino prácticamente sin experiencia en el campo político, para que mejore lo que fueron varios años de abandono por parte del Disabatinismo. Esa euforia daba pie para el comienzo de un nuevo ciclo en la vida de los sanvicentinos, una esperanza ajustada a la palabra “cambio”.
En la gestión de Gómez se vivieron cosas muy particulares, negativas y positivas. Hubo avances como la reapertura del frigorífico en Korn, de la salita Yapeyú, la habilitación del parque industrial en San Vicente y el cierre del basural a cielo abierto en la misma localidad. En tanto que en Domselaar se destacó la vuelta del tren y los comienzos de obra para la llegada del gas natural.
Lo que pudo ser un punto importante para entender la derrota de Gómez es ese microclima en los barrios que se vivieron estos últimos meses sobre todo en Korn. Es que la complejidad de las situaciones con la falta de obras, la poca atención a reclamos que grupos de vecinos tuvieron en meses, los repentinos dramas con el servicio de luz y sobre todo los repetidos casos de inseguridad, hicieron que la gestión se fuera deteriorando un poco en este último tiempo y que los vecinos, en muchos casos, se arrepintieran de su voto. Obviamente que a esto hay que sumarle el complejo escenario político y económico que fue dándose en el gobierno macrista.
La gente esperaba resultados en un corto lapso, Korn fue el verdugo, San Vicente y Domselaar acompañaron. La respuesta estuvo en las urnas. Quizás hasta podemos decir que Korn fue un pilar decisivo de esta última elección.
En Juntos por el Cambio en San Vicente se vivió un clima de crisis, con peleas internas, falta de acuerdos entre sectores que integran el frente, desgaste continuo por falta de respuestas a problemáticas, dejaron entrever la cierta falta de experiencia y respuesta política a muchos funcionarios que no supieron cómo manejar diversas situaciones.
Una gran mayoría ha depositado la confianza en Nicolás Mantegazza, quien dijo que va a convocar a todos los sectores para trabajar para un San Vicente distinto. Muchos no dejan de lado su relación política en sus inicios en la escena local con el Disabatinismo, por eso será sin dudas algo que seguramente muchos remarcarán ante cada posibilidad. Habrá mucho por analizar, las urnas ya hablaron…
El microclima político que se vive en el distrito es muy particular, en el 2015 se vivió algo muy destacado, porque la gente depositó la confianza en Gómez, un vecino prácticamente sin experiencia en el campo político, para que mejore lo que fueron varios años de abandono por parte del Disabatinismo. Esa euforia daba pie para el comienzo de un nuevo ciclo en la vida de los sanvicentinos, una esperanza ajustada a la palabra “cambio”.
En la gestión de Gómez se vivieron cosas muy particulares, negativas y positivas. Hubo avances como la reapertura del frigorífico en Korn, de la salita Yapeyú, la habilitación del parque industrial en San Vicente y el cierre del basural a cielo abierto en la misma localidad. En tanto que en Domselaar se destacó la vuelta del tren y los comienzos de obra para la llegada del gas natural.
Lo que pudo ser un punto importante para entender la derrota de Gómez es ese microclima en los barrios que se vivieron estos últimos meses sobre todo en Korn. Es que la complejidad de las situaciones con la falta de obras, la poca atención a reclamos que grupos de vecinos tuvieron en meses, los repentinos dramas con el servicio de luz y sobre todo los repetidos casos de inseguridad, hicieron que la gestión se fuera deteriorando un poco en este último tiempo y que los vecinos, en muchos casos, se arrepintieran de su voto. Obviamente que a esto hay que sumarle el complejo escenario político y económico que fue dándose en el gobierno macrista.
La gente esperaba resultados en un corto lapso, Korn fue el verdugo, San Vicente y Domselaar acompañaron. La respuesta estuvo en las urnas. Quizás hasta podemos decir que Korn fue un pilar decisivo de esta última elección.
En Juntos por el Cambio en San Vicente se vivió un clima de crisis, con peleas internas, falta de acuerdos entre sectores que integran el frente, desgaste continuo por falta de respuestas a problemáticas, dejaron entrever la cierta falta de experiencia y respuesta política a muchos funcionarios que no supieron cómo manejar diversas situaciones.
Una gran mayoría ha depositado la confianza en Nicolás Mantegazza, quien dijo que va a convocar a todos los sectores para trabajar para un San Vicente distinto. Muchos no dejan de lado su relación política en sus inicios en la escena local con el Disabatinismo, por eso será sin dudas algo que seguramente muchos remarcarán ante cada posibilidad. Habrá mucho por analizar, las urnas ya hablaron…
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